Recuerdos.

Aún recuerdo esos días que pasaba a tu lado, en los que mi única preocupación era verte sonreír, que te lo pasaras bien mientras estabas conmigo. Recuerdo la primera vez que te vi, ninguna de las dos se atrevía a hablar, solo eran miradas con alguna que otra risa. Recuerdo la primera vez que te besé, en ese instante en el que todo cambio, dos vidas se juntaron para formar solo una, donde pactamos un para siempre. Un para siempre que no llego a cumplirse, un para siempre que quedo en el olvido, como toda promesa que hicimos.

Vivir sin ti.

Y hoy puedo volver a gritar de nuevo que soy feliz, que no te necesito para nada, que tu sonrisa ya no me hace a mí sonreír, que si te ahogas en lagrimas a mi me da igual, que si me dices te quiero haré como que no escuché nada, que si llamas no lo cogeré, que si me dices ven no iré, que si vienes a mi casa no te abriré, que si te veo de nuevo con ella no sentiré esas ganas de pegarle. Hoy puedo gritar que ya te olvidé, que deje de ser esa tonta que iba detrás de ti, hoy ya no te quiero.

Algo me falta.

De nuevo tengo el corazón roto en pequeños fragmentos, y todo porque ella no me quiere. No puedo seguir así, tengo que cambiar, la estructura de mi corazón no puede depender siempre de ella. Tengo que ser fuerte y salir adelante, recogiendo cada fragmento de mi corazón para después reconstruirlo sin que falta ningún fragmento, pero estoy segura de que faltara uno de los mas grandes, el fragmento donde te encuentras tú.

Ámame y que sea para siempre.

Quédate aquí conmigo, no te vayas. Hagamos que este día de lluvia sea el mejor de los días, salgamos de la mano bajo la lluvia, corramos hasta empaparnos en agua sin rumbo alguno. Agárrame y bésame que tus besos sabrán igual que en un día soleado, hazlo como solo tú sabes hacerlo. Abrázame y dime que me quieres una vez más, que siempre seré la única en tu vida, que no hay otra. Regálame cada uno de tus pensamientos en este día tan especial. Ámame y que sea para siempre.

Solo tú.

Quiero volver a sentir tus manos sobre mis caderas,tu calor en mi piel, tus labios sobre los míos. Quiero volver junto a ti, que juntas formemos solo una, que no exista un tú y un yo, que solo exista un nosotras. Quiero escuchar de nuevo tus te quiero en susurros cerca de mi oído, y notar tu respiración en mi cuello, que no exista el miedo si estamos juntas. Quiero que todo vuelva a ser como al principio, sin miedo a nada, sin gente de por medio. Quiero tenerte a mi lado para toda la vida, para algo infinito.

Un puzzle de vida.

Y aquí estoy, con un puzzle entre mis manos, con miedo a que al volver a montarlo alguien venga y lo destroce de nuevo. Estoy cansada ya de la misma historia, monto el puzzle, alguien lo destroza, largos días para volver a montarlo y vuelta al principio. ¿Por qué tiene que se siempre así? Dejad de destrozar puzzle bien montados, dejad de robar piezas de los puzzles para que después no encajen unas con otras. Y decidida voy a montar de nuevo ese puzzle, y te das cuenta de que te falta una pieza, la pieza más importante, la que le da vida a ese pequeño pero gran puzzle. Yo no pienso quedarme aquí sentada esperando a que esa pieza venga a mí por si sola ¿y tú?, ¿vas a esperar a que venga por si sola?. Los puzzles no se montan solos, hay que encajar piezas entre sí para que funciono. Querido corazón, tú eres mi puzzle.